EL GUERRERO DEL ANTIFAZ

N E G R O

El Guerrero del Antifaz entre moros y cristianos

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En marzo de 1981 apareció el primer ejemplar de la colección "El guerrero del Antifaz" en tomos que contenían entre cinco y siete aventuras empezando lógicamente por el número uno. Se trata de la colección "Homenaje a Manuel Gago" y en varios de los ejemplares la Editorial Valenciana publicó en las contraportadas artículos acerca de este artista.

Negro

Existe una palabra que califica a los que en arquitectura, música, pintura, escultura o dibujo realizan el trabajo de creación que después se atribuirá o firmará quien figure como autor. A los que hacen esta labor se les llama "negros".

Claro que no puede calificarse como a tales a los que se limitan a cubrir con tinta el dibujo a lápiz que previamente trazara el autor, o a quienes, aún en el caso de realizar ellos los dibujos, siguieron las pautas del bosquejo que el autor realizase. Estos son colaboradores con los que cuentan muchos dibujantes, precisados a tener quien les ayude para cumplir con sus encargos.

Quien realiza la obra por encargo del que ha de presentarla como autor es el "negro". Así ha habido, e imagino que aún los hay, comediógrafos a quienes les escribían las comedias; escultores que realizaron obras que otros firmaron, y músicos que alcanzaron gran renombre y se enriquecieron con el producto de las canciones que les compusieron músicos desconocidos que trabajaron en la sombra. Frase que quizá ha dado motivo a que se llame "negro" a quienes así trabajan.

El famoso novelista valenciano, Vicente Blasco Ibáñez, en su juventud trabajó de "negro" para un célebre novelista español que había adquirido gran renombre escribiendo novelas folletinescas. Y, así, encontraríamos gran cantidad de famosos que, en los diferentes aspectos del arte, se iniciaron trabajando a la sombra de sus llamados maestros. Y quizá, si pudiésemos estudiarlo profundamente, hallaríamos a muchos que no lograron para sí la fama que, con su obra, proporcionaron a quienes la firmaban.

También Manuel Gago parece ser que trabajó de "negro". Pero no en sus principios, cuando se iniciase en su profesión y su maestro, que no lo tuvo, se aprovechase de sus ayudas. No; mi referencia es que lo hizo ya consagrado. Parece ser que tuvo que continuar la obra de un famoso dibujante que, por causa de ausencia o enfermedad, veíase imposibilitado de continuar la aventura que estaba publicando. Gago continuó la obra durante varios episodios y la publicación no fue interrumpida.

También el necesitó en más de una ocasión los servicios de quienes a la sombra continuasen los episodios de sus aventuras. Cuando por una u otra causa veíase imposibilitado de atender sus colaboraciones, también tuvo que recurrir a valerse de quienes trabajasen por él. Gajes del oficio que, en nuestro tan recordado amigo, subsanaban fácilmente aquellos que con él, y al pairo de él, se forjaron como dibujantes.

J. Soriano Izquierdo para el número 36 de la colección HOMENAJE A MANUEL GAGO.



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